domingo, 10 de octubre de 2010

Animales de Temporada Ausente

El maíz hace maíz
y la carne hace carne
el silencio duerme sobre mi pecho
como el hambre sobre los pobre;
y aún no sé que nace
de tan extraño animal.

Me galopa una tristeza,
puedo sentir sus musculos hambrientos
apretandome las costillas

¡Aún no sé que animal nos habita!
y ya empiezo a ser testigo de sus miserias;
aún ronda mi carne
me cabalga
se me está incubando en el pecho.

Desesperado lo tomo entre mis brazos
y lo reviento en el espejo;
el teléfono suena,
al cabo de diez minutos de renacimientos frustrados
apareces en la puerta,
y su cadaver se desliza hasta un rincón,
esperando que te marches
para salir de su tumba,
y reclamarme tu a-u-s-e-n-c-i-a